sábado, 25 de junio de 2011

De marte a la Tierra

No me percate, en que me momento sucedió, solo se que necesitaba ropa. Ropa para tapar lo que nunca nadie a visto, a parte de mis ojos... Al lado mio había un charco, pero no de barro, este charco estaba repleto de monedas, intente extraer algunas, pero fue imposible, se resbalaban de mis manos... Me levante y camine muy tranquila, a pesar del frió que tenia y la carencia de vestidura que precisaba, a lo lejos vi a un hombre y a una mujer que discutían, ella tenia un bulto en su abdomen, no me alarme, fue como si estuviera acostumbrada a ver este tipo de espectáculos. Continué caminando y al final de una angosta calle, vi como se acercaban pequeñas ratas, que en unos próximos minutos me acompañarían en mi pausado andar. A medida que caminaba se iban duplicando, y el fin de la calle no llegaba nunca. Descanse pero en un abrir y cerrar de ojos, me encontré en una mesa llorando profundamente, acompañada de personas jamas antes vistas que me entregaban su calma, me pare educadamente y fui en busca de plata, tal vez tenga relación con el charco lleno de monedas, pero no, abrí una puerta desconocida y volví al lugar del comienzo, cuando quise retractarme la puerta desapareció, el lugar estaba desalojado por la pareja que discutía, los ratones parecían haberse esfumado y el olor de desechos, despertó mis nauseas, me hizo vomitar, y botar unos extraños gusanos... Después me senté, y mi cabeza se hundió en mis rodillas, prendí un cigarro, esperando que alguien me regalara un pasaje a la tierra... Y ahí quede...


Desde ahí, nadie me ha buscado, nadie sabe de mi, he desparecido por arte de magia, he vagado por caminos y los he descubierto con mis mas hábiles acciones... Me quedare acá, hasta que alguien llegue a este lugar, ahí seremos 2, y el ambiente se repletara de desconciertos mutuos, en donde seamos escuchados equitativamente...


ATTE: Valentina Parada

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